En el portal del diario español El País del 8 de julio de este año, con el título «El rescate del menor del Jerte: “Vi al niño acurrucado entre dos piedras, tiritando”», se lee en el artículo de Manuel Viejo:

Una pista hormigonada sube junto a la Oficina de Turismo de Jerte (Cáceres). Curva cerrada a izquierda, otra a derecha. Bifurcación. Aparcamiento, tramo a pie. De fondo, el sonido fuerte de una cascada. De cerca, jaras, helechos, castaños, cerezos. Y un terraplén: el Barranco de Hoyos de Jerte, emanando agua turbia con fuerza. Aquí el jueves sus aguas se cobraron la vida del matrimonio formado por José García-Margallo y Macarena Guisado, ambos de 43 años, y de sus hijas Macarena, de 11; y Lourdes, de nueve. El hijo pequeño, Joaquín, de seis años, logró salvarse, al igual que el monitor de barranquismo con el que estaban pasando la mañana.

Comentario

No hay que confundir manar con "emanar". Manar es un verbo aplicable a líquidos, mientras que "emanar" se emplea para gases o sustancias volátiles.

Con la corrección tenemos:

Una pista hormigonada sube junto a la Oficina de Turismo de Jerte (Cáceres). Curva cerrada a izquierda, otra a derecha. Bifurcación. Aparcamiento, tramo a pie. De fondo, el sonido fuerte de una cascada. De cerca, jaras, helechos, castaños, cerezos. Y un terraplén: el Barranco de Hoyos de Jerte, manando agua turbia con fuerza. Aquí el jueves sus aguas se cobraron la vida del matrimonio formado por José García-Margallo y Macarena Guisado, ambos de 43 años, y de sus hijas Macarena, de 11; y Lourdes, de nueve. El hijo pequeño, Joaquín, de seis años, logró salvarse, al igual que el monitor de barranquismo con el que estaban pasando la mañana.