La congresista exfujimorista Paloma Noceda formalizó su denuncia ante la Comisión de Ética Parlamentaria al presidente de la Comisión de Fiscalización, Luis López Vilela (Fuerza Popular) por presuntos tocamientos indebidos.
Noceda había narrado los hechos en la sesión plenaria del Congreso del sábado último, cuando se debatió la sanción para el legislador Moisés Mamani, por haber perpetrado el mismo delito contra una aeromoza. “Un día estoy en una reunión con colegas y yo estaba sentada dando la espalda y viene ese colega y me hace una suerte de masaje asqueroso en el cuello”, había explicado Noceda el sábado.
“Ese masaje asqueroso hasta el día de hoy lo tengo en la mente. Me generó repulsa, me generó asco, vómito; y eso es cosa del día a día. Acá las asesoras la pasan mal, las asistentes la pasan mal, porque siempre aprovechan cuando una mujer da la espalda, allí se hace el barrido con la mirada de abajo para arriba”, señaló entonces.
Por el mismo hecho Mamani fue sancionado con 120 días de suspensión y además sería desaforado para dar curso a la denuncia penal que podría depositarlo en la cárcel.
López Vilela había guardado silencio, pero tras conocerse la formalización de la denuncia de Noceda negó haber realizado tocamientos indebidos a dicha parlamentaria.
Negó “rotundamente toda la denuncia que está haciendo la congresista”, dijo, y agregó que ella tendría que demostrar los hechos que le imputa. “Si no, tendrá que ser denunciada por difamación a un congresista de la República”, amenazó a través de Canal N.
La “persecución” está de moda entre los denunciados
Al igual que Alan García o Keiko Fujimori, López dijo que se trata de “un perseguimiento” del Gobierno, ante las investigaciones que realiza la Comisión de Fiscalización sobre el caso Chinchero.
