El Comercio y medios de su grupo expusieron reuniones del presidente Pedro Castillo en su vivienda, a partir de lo cual se tejen suposiciones sobre corrupción que no se sabe si son ciertas o falsas y sin duda Castillo deberá explicar sin demora lo realmente ocurrido.

 

Pedro Castillo 6

 

Castillo, por rodearse de chotanos y cajamarquinos en general, carece de un verdadero asesor de imagen que lejos de adularlo le diga la verdad y le haga entender que no puede jugar a ser el campesino ingenuo para que sus actos después se presten a la duda o el escándalo, como en este caso, que debe ser investigado por posible favorecimiento en adjudicación de licitaciones a los visitantes al inmueble en el cual vive en el distrito limeño de Breña.

Ante esto recordamos que dichos medios nunca espiaron las visitas a las viviendas de otros mandatarios ni a los lugares que serían posibles puntos de encuentro de lobbistas o empresarios de malas costumbres que pudieron pasar desapercibidos.

Así, nadie espió al lobbista y expresidente Pedro Pablo Kuczynski, quien a menudo acudía a un club sanisidrino. ¿Alguna vez se preguntaron si se reunía allì con otras personas? Tampoco hicieron escándalo cualdo recibìa en su vivienda a ministros como Mercedes Araoz.

¿Alguna vez se preocuparon por saber si el expresidente Francisco Sagasti recibía visitas en su vivienda de La Molina?

Tampoco informaron si a la vivienda de Ollanta Humala y Nadine Heredia acudía gente a reunirse con alguno de ellos. En este caso daba lo mismo con cualquiera de los dos cónyuges, pues Heredia misma se inmiscuía en actos de gobierno y ahora ambos se encuentran inmersos en procesos judiciales por corrupción.

De igual manera, de la famosa suite de hotel donde Fortunato Canaán se reunía con casi todo el gabinete ministerial del segundo gobierno aprista, comenzando por Jorge del Castillo, sólo se supo muy poco, fue un escándalo revelado sólo en parte. No sólo eso, existiendo Ley de Transparencia, el portal de instituciones de gobierno aprista cumplía escasamente en publicar detalle de la información que debìa estar disponible para el público.

Alejandro Toledo se reunía con empresarios en su vivienda en Camacho o Punta Sal con los empresarios César Almeida o Eugenio Bertini. Nunca informó la prensa de ello, sino fue años después, cuando Toledo fue procesado por corrupción.

Alberto Fujimori despachaba desde el SIN y hasta vivía allí manteniendo sus actividades en la sombra. Y ya se conoce la larga lista de personas que desfilaron por la salita del SIN a conversar con el mandadero de Fujimori, Vladimiro Montesinos. En su momento nadie dijo nada sobre las reuniones que el dictador sostenía incluso en cuartos de hotel con periodistas que se metían a su cama.

Nada de eso dijeron esos medios hasta que pasó mucho tiempo o hasta que se destaparon los escàndalos de corrupción.

Se advierte un claro afán de sectores empresariales relacionados a estos medios para lanzar sus dardos contra Castillo. Las acciones de este gobierno tienen preocupada a las grandes mafias empresariales como el Club de la Construcción, el cual acaba de recibir una multa cercana a los S/ 3,000 millones por parte del Indecopi, al cual además buscan sustraer del ámbito del Poder Ejecutivo para manipularlo desde el Congreso. Recordemos que por ejemplo la empresa Graña y Montero, del Club de la Construcción, está relacionada con un director y accionista del grupo El Comercio.