La presunta omisión, descuido, negligencia o incompetencia de los fiscales que no cumplen correctamente con el trabajo para el cual son pagados por todos los peruanos no sería más que la peor de las corrupciones, pues los hechos apuntan a que sería intencional su mal trabajo, a cambio de pago por parte de los acusados, como la mayoría del Perú lo cree.

 

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Si no es así no se entiende por qué entregan expedientes mal hechos para hacer perder el tiempo al Poder Judicial (PJ), que tiene que devolverlos y verse impedido de procesar a peligrosos delincuentes, como son los recientes casos de la venezolana Wanda del Valle y posiblemente ahora con el exjuez supremo, César Hinostroza Pariachi, quie escaparía del brazo de la justicia.

Hinostroza, en junio de 2022, fue destituido e inhabilitado por el Congreso, acusado por los presuntos delitos de organización criminal. patrocinio ilegal, tráfico de influencias, negociación incompatible e infracciones a la Constitución. Este sujeto seguiría enquistado en el PJ hasta ahora, de no ser por el escándalo causado cuando IDL Reporteros difundió audios que revelaban negociaciones para quitar o reducir penas a peligrosos delincuentes y comprometían a este indeseable con funcionarios del Consejo Nacional de la Magistratura y a jueces como Walter Ríos, en lo que se denomina el caso de los Cuellos blancos.

Actualmente Hinostroza se encuentra en calidad de prófugo tras burlar a las autoridades de España, país al que había huído.

En tanto, en nuestro país a propósito la Fiscalía de la Nación, encabezada por Patricia Benavides, quien ha sido reiteradamente acusada de una presunta relación con los Cuellos Blancos, mantiene una absurda doble investigación que a propósito buscaría hacer naufragar el proceso contra Hinostroza.

Sobre la investigación, Diario Uno dice: “Ya este diario había puesto en evidencia que la fiscal Rocío Sánchez, a pesar de tener identificado al abogado José Luis Castillo Alva como el “Pepe Lucho” de Los Cuellos Blancos, lo convirtió en testigo protegido y su situación solo cambió cuando en entonces fiscal supremo Jesús Fernández Alarcón le puso la puntería. Ahora, misteriosamente y siguiendo la huella de la exfiscal Sánchez, el Equipo Especial Cuellos Blancos se propone darle a Hinostroza Pariachi excusas para que complique la investigación de la Primera Fiscalía Suprema Transitoria Especializada en Delitos de Funcionarios Públicos por la realización de actos de investigación que están evidentemente fuera de su competencia.De acuerdo a analistas legales consultados, este grueso error podría no ser casual, sino parte de una estrategia dolosa de defensa”.

“También podría estar indicando que los tentáculos de Los Cuellos Blancos están intactos y que podrían haber alcanzado a la Fiscalía.Por ello, los especialistas consultados coinciden en señalar que toca al Jefe de la Autoridad Nacional de Control del Ministerio Público, Juan Antonio Fernández Jerí, tomar acciones inmediatas contra quienes, aparentemente, estarían creando las condiciones para que una seguidilla de nulidades entrampe este decisivo caso contra quienes corrompieron el sistema de administración de justicia”, advierte.