El Equipo Especial contra la Corrupción del Poder (Eficcop) y la Diviac allanaron hoy la sede principal del Ministerio Público en la denominada  operación Valkiria V, para investigar una presunta red criminal liderada por la fiscal de la Nación, Patricia Benavides.

 

Patricia Benavides Vargas 4

La Fiscalía plantea que Benavides habría actuado de forma ilícita para influenciar en la remoción de la Junta Nacional de Justicia, en la designación del defensor del Pueblo, Josué Gutiérrez, e inhabilitación de Zoraida Ávalos.

Además de Benavides estarían involucrados Abel Hurtado Espinoza, Miguel Ángel Girado Isidro y Jaime Javier Villanueva Barreto, contra quien se dictó una orden de detención preliminar por 10 días.

Convenientemente, Javier Villanueva fue internado en la clínica San Pablo supuestamente para librarse del brazo de la justicia. Los médicos legistas evaluaron su estado de salud y determinaron que no se trata de nada grave, por lo que solo recomendaron el alta para el mediodía.

Entre gallos y medianoche

Esta madrugada, Jaime Villanueva Barreto fue cesado en el cargo de Gerente Central del Despacho de la Fiscalía de la Nación por “necesidad de servicios”, según la resolución firmada por Benavides.

También entre cantos del gallo, Benavides dio por concluido el nombramiento de Marita Barreto Rivera en el cargo de fiscal superior provisional del distrito fiscal de Lima Centro, además de su rol como coordinadora del equipo especial de Fiscales contra la Corrupción en el Poder.

La “Operación Valkiria”, está a cargo de la fiscal Marita Barreto y el coronel PNP Harvey Colchado, e involucra a Benavides en calidad de presunta lideresa de una organización criminal que tendría, en un segundo nivel, al propio Jaime Villanueva, al funcionario del Ministerio Público Miguel Angel Girao Isidro, y al coordinador parlamentario Abel Hurtado Espinoza.

Dicha operación es parte del caso denominado “La fiscal y su cúpula de poder” que investiga a Jaime Villanueva, Miguel Angel Girao Isidro y Abel Hurtado Espinoza, quienes habrían “instrumentalizado el poder constitucional del monopolio de la persecución penal para beneficio propio”, informa RPP.

Según el Equipo Especial de la PNP en apoyo al Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción del Poder, esta presunta organización criminal se mueve en tres diferentes ejes.

Primero, se habría pretendido influir ilícitamente en las decisiones de congresistas para que destituyan a los miembros de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) a través de un procedimiento constitucional, porque la JNJ investiga a Patricia Benavides y podría suspenderla. En contraprestación, Benavides archivaría una serie de denuncias de carácter penal por corrupción en favor de esos congresistas.

Segundo, habrían influido en la designación de Josué Gutiérrez en el cargo de defensor del Pueblo. Éste presidiría una eventual comisión especial para seleccionar a nuevos miembros de la JNJ para que Benavides pueda permanecer en lo más alto de la cúpula de la dirección administrativa del Ministerio Público.

Tercero, habrían promovido la inhabilitación de la exfiscal de la Nación Zoraida Ávalos mediante un proceso constitucional en el Congreso. Los votos de los congresistas serían pagadoa con un favorecimiento en las investigaciones que cuentan con resolución pendiente en la Fiscalía de la Nación.

Ayer Benavides también dio por concluida la designación en sus cargos del fiscal superior Rafael Vela Barba en la coordinación nacional de las Fiscalías Especializadas en Delitos de Lavado de Activos, en el despacho de la Segunda Fiscalía Superior Nacional Especializada en Delitos de Lavado de Activos y en la coordinación del Equipo Especial de Fiscales.

El Equipo Especial de la Policía Nacional del Perú en apoyo al Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción del Poder accedió a un conjunto de chats en donde Jaime Villanueva se presentaba como "el único autorizado por la fiscal de la Nación" para hablar en su nombre.

Además, Villanueva habla de la importancia de Josué Gutiérrez para la elección de una nueva JNJ.

“Es en este contexto que el defensor es muy importante, pues él es quien preside la comisión que elegirá a la nueva JNJ. Si se queda la señora, que está ahora la nueva junta, también estaría tomada por los caviares. Eso es lo peligroso”, se puede leer en una de las conversaciones.