La presencia de un sacerdote habría perturbado a la presidente Dina Boluarte, quien tras verlo arremetió contra Dios diciendo que “Está mal mencionar a Dios al inicio de nuestras actividades”. Sucedió cuando la mandataria se encontraba inaugurando un colegio en Piura este jueves y en la ceremonia oficial estaba presente un sacerdote.

 

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“Veo aquí a un sacerdote... creo que hacemos mal al inicio de nuestras actividades mencionar a Dios. No importa si somos católicos, evangélicos, cristianos, pero la fe que uno tiene frente a ese ser supremo —que le llamamos Dios— es importante”, dijo.

“Cuando Dios envió a su hijo a la tierra, nos enseñó: ‘ama a tu prójimo como a ti mismo’. Tenemos que ir de la mano de la enseñanza de nuestro primer maestro. Cultivemos el amor por donde caminemos”, sostuvo.

¿Puede ser por la influencia masónica?

Conocida es la influencia masónica en Boluarte, quien en su gabinete tiene al ministro de Justicia Eduardo Arana, masón grado 33. En el grado 33 los masones ya están entregados a la adoración a Lucifer o el demonio y entre ellos se llaman maestros. ¿Por ello Boluarte, en lugar de hablar de la divinidad de Jesús habla de un maestro? Los masones a través de la Historia han estado detrás de diversas persecuciones y atentados contra la Iglesia Católica.

¿Será que Boluarte pretende que no se mencione a Dios antes de iniciar nuestras actividades y que se mencione al demonio?

Llama la atención que Boluarte pretenda relegar a Dios. Sabemos el efecto positivo en las aulas escolares donde se inicia el día con oraciones como el Padre Nuestro y el Ave María.

Estemos atentos con los cambios que plantee este gobierno en Educación, pues la masonería tiene predilección por atacar a la Iglesia Católica, para la cual todo masón es castigado. El Código de Derecho Canónico de 1917 sanciona la pertenencia a la masonería con la excomunión ipso facto, pues no es compatible el culto a Dios con el culto a Lucifer que practican los masones. La versión de 1983 agrupa a todas las organizaciones que conspiren contra la Iglesia sin mencionar la pertenencia a la masonería, no obstante, para evitar confusión, el entonces Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Joseph Ratzinger, Benedicto XVI, aclaró en un documento que los principios de la masonería son incompatibles con la doctrina de la Iglesia.