RPP miente: dice que García homenajeó al Señor de los Milagros

Según Radio Programas del Perú, “El Cristo Moreno inició su procesión por la avenida Tacna siguiendo por el jirón Conde de Superunda, hasta llegar a la Plaza de Armas de Lima, donde recibió el homenaje del Presidente de la República, Alan García, junto al gabinete ministerial desde los balcones de Palacio de Gobierno”, como publica en su portal.


Se sabe que RPP es una emisora que siempre está presta a someterse a los caprichos del gobierno de turno. Siempre fue así, con o sin dictadura. Sin embargo, no se entiende que lleguen a mentir a un público mayoritariamente católico para decirle que el Presidente y su gabinete estaban presentes en el homenaje del día central, 18 de octubre.

Como ustedes pueden apreciar en la foto, en el balcón se observa a un grupo de desconocidos, tal vez sean trabajadores de Palacio, no lo sabemos, pero cualquiera puede ver que no estaban el Presidente, su esposa, hijos ni el gabinete.

En contadas ocasiones un Presidente de la República ha estado ausente. Pero en estos casos lo ha representado el Presidente del Consejo de Ministros, acompañado de su gabinete.

¿Por qué ese afán de mentir deliberadamente sobre este hecho?

Alan García gusta de promoverse como cargador del Señor de los Milagros, no obstante, al no dejar en su representación siquiera a un ministro vemos el poco respeto que tiene por esta manifestación religiosa, que no es más que una muestra del constante doblez de la conducta del Presidente, quien pretende ser y hacer en apariencia una cosa, pero la verdad es otra.

Cabe señalar que tras siglos de tradición el homenaje al Señor de Los Milagros es de hecho un acto de protocolo, de parte del Presidente de la República, del Congreso de la República y de todas las instituciones oficiales que se encuentran en el recorrido procesional. Por tanto, esta actitud de García constituye no sólo un insulto a los católicos, sino que demuestra que está pisoteando las funciones protocolares que el pueblo le mandó asumir.

Una vez más cierta prensa nos demuestra que no le podemos creer.