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El Halloween es condenado por el Vaticano
El Halloween no es una costumbre que deberíamos combatir por ser extranjera o por ser demasiado peruanistas. Hay costumbres extranjeras que pueden ser buenas, pero no es el caso del llamdo Halloween.
Son muchos los aspectos negativos. En primer lugar, los niños son incitados a tocar las puertas de desconocidos, conducta pésima que enseña la falta de respeto a la tranquilidad de los demás.
En segundo lugar, piden golosinas con lo que se destruye las buenas enseñanzas de la familia y las escuelas de no pedir nada a desconocidos. Además, les pueden dar golosinas de la peor calidad. No es malo que los niños consuman dules, pero debe cuidarse su calidad y cantidad.
En tercer lugar, se acostumbra a los niños a celebrar la muerte, las calaveras, los monstruos, los demonios, los fantasmas, cuando a la gente se le debe enseñar a celebrar la vida, la alegría, la armonía, la belleza. Esto es muy serio para quienes están en proceso de formación, pues se toma como juego la muerte y el mal.
En cuarto lugar, se expone a los niños a situaciones desagradables y hasta peligrosas. Los insultan adultos malhumorados por haberse tocado su puerta y hasta pueden toparse con un pederasta que puede manosearlos o hacer algo peor, hechos que a veces los niños ni siquiera saben acusar.
Por otro lado, los maestros están promoviendo esta pésima celebración dejando de lado una superior, que es el Día de la Canción Criolla.
En cuanto al ministerio de Educación, es tan incompetente que parece que no existiera, pues no hay ninguna directiva para los profesores de los centros educativos que les indique explicar lo mala que es la celebración del Halloween.
Por último, en el Perú la mayoría es católica o cristiana, pero por ignorancia muchos caen en alentar, promover o participar en esta fiesta condenada por El Vaticano, como se informó el año pasado:
El Vaticano condena a Halloween por ser fiesta anticristiana
Es una corriente siniestra de ocultismo, asegura la Santa Sede
La Iglesia Católica mostró su alarma por la difusión de la costumbre de Halloween desde Estados Unidos a otros países, por ser una celebración pagana de terror, miedo y muerte, que transmite mensajes peligrosos, según advirtió el periódico oficial del Vaticano L'Osservatore Romano.
Como se sabe, los niños se visten de fantasmas y demonios y molestan tocando puertas de viviendas donde piden golosinas.
El periódico citó al experto en liturgia, padre Joan Maria Canals, quien señaló que la fiesta de Halloween responde a una corriente de ocultismo y es absolutamente anticristiana.
Recomendó a los padres de familia estar alertas ante esta influencia y que traten de dirigir el significado de la fiesta hacia la salud y la belleza antes que al terror, el miedo y la muerte.
Otra advertencia de importancia sobre Halloween (que se suma a otras de la Iglesia de España y México) había sido lanzada el año pasado a través del periódico Awenire, dirigido por obispos italianos quienes alertaron manifestando que se trata de una peligrosa celebración macabra de horror, que puede alentar a las sectas satánicas inescrupulosas.
