La diversidad de climas en el Perú hace necesario que se diseñe diferentes respuestas para cada realidad que permitan enfrentar los efectos del cambio climático en Los Andes.

Así lo aseguró, Gabriel Quijandría, Viceministro de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales del Ministerio del Ambiente (MINAM) en la conferencia “Experiencias en la adaptación para el cambio climático en el Perú” desarrollada este lunes 18 de junio en el Pabellón de Montañas en Río de Janeiro como parte de las actividades de la Cumbre Río+20.

“No hay un simple clima en el país, por lo tanto no existe un solo impacto como efecto  del cambio climático, habrá alteración que provocará efectos diferenciados en cada región y por lo tanto se requerirá de respuestas distintas”, afirmó el viceministro.

Los Andes peruanos, por efecto del cambio climático, han visto reducidos sus glaciares en un 25% en los últimos 35 años, la deglaciación ha afectado su alta diversidad biológica y ha provocado la pérdida de la cuarta parte de su superficie original desde la década de los 70.

Según las proyecciones, existe una perspectiva de alteración completa, con un crecimiento de temperatura promedio de 1.6 a 1.4 grados centígrados y una reducción en la disponibilidad del agua en la Cuenca del Pacífico que se proyecta en 6% para el 2030.

Entre las consecuencias de esta situación están el incremento de temperaturas, lluvias intensas en el norte y en la sierra norte, así como un decrecimiento de las precipitaciones fluviales en la sierra central.

Frente a esta situación, el MINAM y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) vienen trabajando juntos con el fin de introducir el enfoque de adaptación al cambio climático y lograr incorporar en el presupuesto público, recursos que reconozcan las necesidades de inversión adicionales para responder a estos nuevos escenarios.

Durante la reunión también se informó que el gobierno peruano, a través del MINAM, viene elaborando una propuesta de Programa Nacional de Gestión del Cambio Climático. A esto se suma que a la fecha son 8 gobiernos regionales que ya cuentan con una estrategia para enfrentar este evento, entre ellos, Apurímac, Loreto, Amazonas, Piura y Lambayeque.

 En cuanto al nivel local se comentaron experiencias que se vienen aplicando en diferentes comunidades para enfrentar el impacto del cambio climático, como por ejemplo prácticas orientadas a reducir vulnerabilidades, acciones de gestión ordenada de territorio y gestión integrada de cuencas.

Algunas iniciativas como el “Proyecto de Adaptación al Impacto del Retroceso Acelerado de Glaciares en los Andes Tropicales - PRAA" viene aportando a esta tarea con trabajo en el fortalecimiento de capacidades para ampliar las actividades que no dependan necesariamente del uso de los recursos naturales disponibles, o en otros casos, generando mayor valor a sus productos como los tejidos.

Para el PRAA, otro de los retos es lograr articular los saberes locales con los científicos. Según sus representantes que participaron en esta conferencia, es importante hacer un contraste entre lo que aporta la ciencia y lo que perciben las poblaciones pues ello enriquece el conocimiento sobre los Andes y el cambio climático.