Gigantesca explosión en la constelación de Carina, equivalente a 9 mil estrellas supernovas

La explosión inmediatamente después. Foto: NASA/DOE/Fermi LAT


Por Rocío Ferrel

Astrónomos detectaron la explosión de rayos gamma más grande en el universo, con una potencia equivalente a 9000 estrellas explotando, en la constelación de Carina, visible en las proximidades del Polo Sur, según informa la revista Science.


La poderosa explosión no sólo es la más grande que se ha visto, sino la que produjo movimientos más rápidos y la mayor cantidad de energía inicial. El misterioso suceso cósmico ocurrió a 12 mil 200 millones de años luz y los astrónomos calculan que su luz tomó la mayor parte de la edad del universo en llegar a la Tierra.

Los estallidos de rayos gama son los más luminosos entre las diversas explosiones que tienen lugar en el universo. Los científicos creen que las explosiones gamma acaecen cuando a las raras estrellas grandes se les agota el combustible y se destruyen para formar un agujero negro, entonces expulsan material que de la estrella sale al espacio y se encuentra para interactuar con más gas ya expelido por la estrella.

Todavía no se ha llegado a comprender la naturaleza del material expulsado en este tipo de explosiones, pero se cree que son expelidos a una velocidad cercana a la de la luz (99.9999% de la velocidad de la luz), que genera rayos gamma intensos.

Los astrónomos han denominado a esta explosión GRB 080916C, y fue observada el año pasado por el telescopio Fermi de rayos gama de la agencia espacial estadounidense NASA, el cual fue diseñado especialmente para detectar la radiación gamma.

El momento de la explosión (arriba). Siete horas después (abajo) NASA/DOE/Fermi LAT.

Este misterioso y espectacular estallido fue visto en la Tierra a las 15.13 horas GMT del 15 de setiembre de 2008. Tuvo corta duración, pero fue más potente que unas 9000 supernovas normales, o estrellas explotantes, y se pudo apreciar los puntos de mayor y menor emisión de energía con una diferencia de cinco segundos, lo cual fue un gran acontecimiento astronómico.

Unas 32 horas después de la explosión, Jochen Greiner, del Max Planck Institut für Extraterrestrial Physik de Garching, Alemania, lideró un grupo que rastreó la energía que se iba desvaneciendo después del estallido inicial. Su equipo pudo capturar el campo en siete longitudes de onda empleando el detector óptico de rayos gama del detector casi-infrarrojo, o GROND.

Cuanto más lejos está el objeto, tanto más roja es la longitud de onda donde ocurre el desvanecimiento de la energía, lo cual permite a los astrónomos calcular la distancia.

En la constelación de Carina se encuentra la estrella Eta (Eta Carinae), que es una de las estrellas con mayor masa en el universo, con una altísima luminosidad, equivalente a cuatro millones de veces la del Sol, y de un tamaño estimado entre 100 y 150 veces la masa de nuestra estrella. Eta Carinae irradia el 99% de su luminosidad en la parte infrarroja del espectro, con lo que es el objeto más brillante que se ve desde la Tierra en la longitud de onda del orden de los 10-20 micrones.

Si las emisiones de rayos gamma estuviesen dirigidas hacia la Tierra, podrían afectar a equipos de comunicaciones y satélites cuando son intensas.