Los científicos rusos han creado un sensor geomagnético capaz de convertirse en una alternativa al sistema de navegación ruso Glonass bajo el agua. El dispositivo, insensible a las fluctuaciones de temperaturas, podría proporcionar a las naves submarinas, incluidos los drones, unas coordenadas precisas, escribe el diario Izvestia.

La idea de usar el campo magnético de la Tierra para la navegación no es nueva. La ubicación del objeto se determina por un punto en el mapa geomagnético, vinculado a uno geográfico. Desde hace décadas se han desarrollado varios tipos de sensores de campo magnético.

Sin embargo, sus desventajas son una sensibilidad insuficiente a los campos geomagnéticos débiles y una sensibilidad alta a las temperaturas, lo que puede causar errores en las mediciones a bordo del vehículo submarino. Los científicos de la Universidad Estatal de Sarátov han resuelto este problema.

El funcionamiento del nuevo sensor ruso se basa en la sensibilidad de un material, que se llama ferrita, a un campo magnético muy débil que rodea la Tierra. Cuando el campo magnético externo cambia, la frecuencia del llamado resonador ferromagnético también cambia.

Los científicos prometen que el dispositivo funcionará de manera estable en el rango de -50 a +40 grados Celsius.

No obstante, hay otro obstáculo en el uso de los sensores geomagnéticos: se necesita un mapa muy preciso del campo magnético de nuestro planeta.

El campo magnético en la superficie de la Tierra puede medirse por unos satélites especiales. Sin embargo, la magnetización de la corteza terrestre y los depósitos de algunos minerales cambian bastante este campo, aunque sea en áreas pequeñas. Los satélites son incapaces de registrar estos cambios.

Por lo tanto, para tener un mapa preciso es necesario realizar mediciones adicionales del campo magnético en la superficie o en las altitudes bajas literalmente en cada kilómetro del planeta, incluidas las áreas sobre el agua.

Por eso, de momento, el estudio de los científicos de Sarátov se mueve más bien en un plano teórico que práctico. Sin embargo, con la llegada de mapas nuevos, la navegación geomagnética puede servir de importante apoyo a la satelital.

Los sensores geomagnéticos tienen varios usos además de la navegación. Por ejemplo, pueden registrar las coordenadas de los depósitos de mineral de hierro, donde hay una fuerte distorsión del campo magnético.

Las mediciones también son útiles para la investigación fundamental. Se sabe que los polos geomagnéticos de la Tierra se están desplazando, y el estudio de este movimiento es importante para comprender los procesos que ocurren dentro del planeta.

Sputniknews, 01.08.2019