IEDEP de la CCL presenta propuestas para obtener ingresos tributarios adicionales por S/. 24.990 millones equivalentes al 5.3% del PBI

A través de una racionalización y posterior eliminación de las exoneraciones tributarias, un combate eficaz contra la evasión del IGV y el contrabando.

Medidas permitirían aumentar la presión tributaria actual de 14,8% a 20,1% en el Perú.


Las fuentes potenciales de ingresos tributarios en el Perú podrían alcanzar los S/. 24.990 millones, que representan el 5.3% del PBI al año 2011, de darse una racionalización y posterior eliminación de las exoneraciones tributarias, las cuales representan el 1,2% del Producto Bruto Interno (PBI); la erradicación de la evasión del Impuesto General a las Ventas (3,7% del PBI) y una mayor lucha contra el contrabando en el país (0,4% del PBI).
Así lo estimó César Peñaranda Castañeda, director ejecutivo del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), durante el III Foro Tributario “Bases para un acuerdo nacional”, organizado por la CCL, la Universidad de Lima y el Instituto Peruano de Derecho Tributario (IPDT); quien sostuvo que este potencial de recursos para el fisco podría adicionar 5,3 puntos porcentuales del PBI a la presión tributaria.

Durante su ponencia “La Política Tributaria en el Perú: Diagnóstico y Propuestas”, el destacado economista señaló que el Perú necesita una reforma tributaria integral basada en un incremento de la recaudación tributaria y la ampliación de la base de contribuyentes.

Al respecto, Peñaranda recordó que el total de contribuyentes inscritos con RUC es de 5’116,811 personas, de los cuales el 99,7% lo representan medianos y pequeños contribuyentes mientras que el 0,3% (14,402 empresas) lo representan los principales contribuyentes.

Del mismo modo, consideró que es importante corregir el sesgo regresivo, toda vez que nuestro sistema impositivo está representando mayormente por los impuestos indirectos (64%), los cuales se concentran en lo que se recauda por concepto de IGV (49%).

Agregó que a diferencia de los países de la OCDE, donde el 70% de la recaudación por Impuesto a la Renta (IR) lo representan personas naturales y el 30% restante son personas jurídicas, en el Perú la situación es inversa originando que el 32% de los aportantes por IR sean personas naturales y el 68% restante sean personas jurídicas.  

Asimismo, consideró que es necesario modernizar y simplificar la administración tributaria. En este sentido sostuvo que la política tributaria debe basarse en el IR, el cual se constituya en el impuesto más relevante por lo que debe revisarse sus tasas, descuentos y progresividad en base a un estudio específico; el IGV, cuya tasa debe reducirse progresivamente analizando su impacto en la recaudación potencial (Curva de Laffer) y el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC), dado que su tasa y aplicación debe responder estrictamente al propósito de corregir externalidades negativas en la actividad económica.

Por otro lado, Peñaranda afirmó que la evasión del IGV le cuesta al Perú 3.7% de su PBI (S/. 13.712 millones al 2008). Asimismo, reveló que el contrabando le costó al Perú US$ 480 millones en el 2009, siendo los sectores Agroindustria y Comercio los más afectados