Chilenos buscarían entrar al negocio de telefonía móvil en el Perú
,,,,,,,,,,Cayetana Aljovín


Los chilenos no se cansan de husmear en el Perú para ver en qué negocio pueden traer sus indeseables capitales. Esta vez sería la telefonía móvil, a través de la empresa Entel PCS, según adelantó El Comercio.


Además de la empresa chilena, dos empresas brasileñas competirían en la subasta de la banda C (1.900 MHz), que es donde los chilenos buscan ingresar, pese a que reconocen que en el mercado ya hay tres operadores consolidados.

La mala costumbre de funcionarios peruanos


Según El Comercio, la inefable Cayetana Aljovín, directora ejecutiva de la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (Pro Inversión), estuvo en Santiago con la finalidad de “promover la subasta entre los ejecutivos de Entel PCS, que estaría interesada en participar también en la licitación de la banda 821 MHz – 824 MHz para Lima, cuya subasta se cerraría antes de fines de junio próximo”. Es decir, los chilenos, ya no solamente husmean, sino que tienen sus agentes  peruanos que husmean por ellos.


Los funcionarios de Pro Inversión son personajes que mantenemos con nuestros impuestos. ¿Por qué tienen que viajar a un país enemigo, Chile, que usurpa tierra y mar peruanos y proclama, de la manera más cavernaria y incivilizada que sus fuerzas armadas llegan hasta donde están sus inversiones?

No sólo eso, los chilenos traen toda clase de competencia desleal, mala calidad, engaños al consumiror y subdesarrollo. Las compañías del exterior que se interesen deben venir o indagar por internet y otros medios, ¿por qué se permite que nuestros funcionarios pierdan tiempo y dinero en los cavernícolas del sur?

Si se trata de realizar esfuerzos para atraer capitales y capitalistas deseables, entonces que nuestros funcionarios viajen a Alemania, Francia o Brasil, que son países desarrollados y amigos, no a un país subdesarrollado y violador del derecho internacional como Chile. Además, ya tenemos más que suficientes capitales chilenos y suficientes problemas con sus inmorales prácticas empresariales.

¿Cuál es el secreto para que nuestros funcionarios viajen tanto a Chile? ¿Son los antecedentes de los chilenos de estar prestos a arrodillarse ante corruptos como Montesinos para besar sus pies y pagar coimas millonarias, como la empresa Luchetti, o las oscuras maniobras de Lan (que se investigan) lo que atrae a los funcionarios peruanos hacia los empresarios chilenos?