La Cámara de Comercio de Lima (CCL) lamenta la decisión de suspender temporalmente la licencia de construcción extendida a la empresa Southern Copper Perú para la ejecución del proyecto minero Tía María en la provincia de Islay, región Arequipa, pues constituye un serio revés para la estabilidad jurídica y el clima de inversiones de nuestro país.

“Fue el gobierno el que otorgó la licencia de construcción al proyecto Tía María y, si bien hubo protestas, ello no es razón para dar marcha atrás en una decisión que le corresponde al propio Poder Ejecutivo. No se puede retroceder en una decisión tomada de acuerdo a ley y que, sobre todo, se basó en el hecho de que la empresa cumplió con los requisitos que se le exigían”, señaló la presidenta de la CCL, Yolanda Torriani.

Sostuvo que una de las fortalezas de nuestro país radica en sus sólidos fundamentos macroeconómicos, los cuales se sustentan a su vez, desde hace 30 años, en una estabilidad jurídica y predictibilidad que no puede ser puesta en entredicho frente a actitudes violentistas de grupos radicales.

“Lo hemos dicho en muchas ocasiones; la población tiene el derecho de expresar su opinión y recibir explicaciones frente a un proyecto minero de la magnitud de Tía María; pero lo que no se puede permitir es que el Estado de Derecho y el imperio de la ley queden de lado por presiones de un grupo que pretende imponer su posición bloqueando carreteras y destruyendo la propiedad pública y privada. Necesitamos que se recupere el principio de autoridad en el país”, subrayó.

Finalmente, sostuvo que la decisión tomada respecto a Tía María afecta de manera muy seria la imagen del país como un lugar que ofrece estabilidad para las inversiones privadas, tanto nacionales como extranjeras, y lo hace en un momento en que el crecimiento económico se muestra débil, lo que repercute en la generación de empleo y  lucha contra la pobreza.