Las acciones de Credit Suisse se mantuvieron cerca de mínimos históricos en las operaciones del hoy temprano después de que el gigante bancario suizo admitiera haber descubierto “debilidades materiales” en sus informes financieros durante los últimos dos años, en medio de la corrida de capitales de importantes empresas chinas de la banca suiza por la pérdida de neutralidad del país helvético al involucrarse en la guerra con Ucrania.
La firma con sede en Zürich dijo que las debilidades equivalían a una “falla en el diseño y mantenimiento de un proceso de evaluación de riesgos efectivo para identificar y analizar el riesgo de incorrecciones materiales”, cita el New York Post.
Credit Suisse aseguró que sus resultados de todo el año no se vieron afectados por el problema y que sus estados financieros aún “presentan bastante, en todos los aspectos importantes, la situación financiera consolidada del Grupo”.
El mes pasado, el banco había revelado una enorme pérdida neta anual de 7.300 millones de francos (unos 8.000 millones de dólares).
Las acciones del banco suizo cayeron hasta un 5% en las operaciones del martes a $2,54, lo que le otorga una capitalización de mercado de solo $10,250 millones. El lunes, la acción alcanzó un mínimo histórico de 2,44 dólares.
La baja se da pese a un repunte en los mercados de EE. UU., ya que los bancos regionales asediados se recuperaron de la liquidación del lunes.
La preocupante revelación generó temor sobre la agitación persistente en el sector bancario después del rápido desinfle de Silicon Valley Bank y Signature Bank en Nueva York, y algunos especularon que Credit Suisse podría ser el próximo en caer.
Los problemas surgieron incluso cuando los altos mandos de Credit Suisse buscan una reestructuración complicada luego de una serie de escándalos que han afectado a la empresa en los últimos años, incluidos los vínculos con la implosión de Archegos Capital Management en 2021.
La semana pasada, Credit Suisse se vio obligada a posponer la publicación de su informe anual para 2022 tras recibir una llamada de última hora de los reguladores de la SEC.
Credit Suisse dijo que el alcance de los funcionarios de la SEC estaba vinculado a una "evaluación técnica de las revisiones previamente divulgadas de los estados de flujo de efectivo consolidados en los años que terminaron el 31 de diciembre de 2020 y 2019, así como los controles relacionados".
El cofundador de Rich Dad Company, Robert Kiyosaki, un inversor que predijo correctamente la caída de Lehman Brothers en 2008, fue uno de los expertos del mercado que expresó su preocupación por la estabilidad de Credit Suisse.
“El problema es el mercado de bonos, y mi predicción, llamé a Lehman Brothers hace años, y creo que el próximo banco en ir es Credit Suisse”, dijo Kiyosaki durante una aparición el lunes en Fox Business Network.
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Kiyosaki dijo que Credit Suisse estaba en problemas porque “el mercado de bonos se está derrumbando”.
El domingo, el Tesoro, la Reserva Federal y la FDIC dijeron que garantizarían todos los depósitos en el condenado Silicon Valley Bank y otra firma cerrada, Signature Bank en Nueva York.
Los federales insisten en que los contribuyentes estadounidenses no enfrentarán ningún costo por la medida de rescate, aunque los expertos le dijeron a The Post que los estadounidenses pagarán más a través de tarifas bancarias más altas y servicios degradados.
