Indecopi (Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedd Intelectual), autorizó la compra de Enel Distribution Perú y Enel X Perú por parte de China Southern Power Grid International (CSGI HK).
La operación tiene un valor de US$ 2900 millones de dólares e implica el dominio absoluto 100% por parte de China sobre la energía en Lima y más del 65% en el país.
Infobae apunta: En Lima, Enel maneja el 54% de la electricidad, mientras que el 46% restante está en manos de Luz del Sur, la cual fue adquirida en 2019 por la empresa estatal China Three Gorges Corporation (CTG). (https://www.infobae.com/peru/2024/02/08/venta-de-enel-sni-reitera-preocupacion-por-monopolio-chino-en-energia-electrica-de-lima-y-pide-estricta-vigilancia/ )
¿Significa, ante la impávida mudez de las instituciones, clubes electorales, figuras y figurones, prensa concentrada, es decir los miedos de comunicación, que la polémica venta de Indecopi, haya que pasarla por alto y con “resignación”?
Hasta el momento, la excepción la protagoniza, para bien aunque con mucha prudencia, la Sociedad Nacional de Industrias, SIN, que exhortó a las autoridades a ejercer vigilancia en las condiciones dadas tras la autorización del Indecopi, a fin de evitar perjuicios a los consumidores del servicio de energía eléctrica en el país.
SNI reitera alerta y pide publicar resolución de venta de Enel.
Según la Constitución los monopolios están prohibidos. Pero en Perú hay muchos y este flamante de la energía eléctrica, ahora en manos del Estado chino y gracias a Indecopi, pone en tela de juicio el rol que deberían tener muchas instituciones.
¿Qué sigue a continuación? Merced a la campaña de privatistas Petroperú hay que rematarla. Hasta un aventurero de esos de saco y corbata, se ha atrevido a afirmar que no se la acepta ni regalada.
Curiosa y claudicante manera de “pensar” porque hay miles de millones invertidos en la flamante Refinería de Talara que integra el patrimonio de Petroperú que es de toda la ciudadanía.
¿Qué más? ¿Volvemos a la feria privatizadora al mejor o más “conveniente” postor de los años del gobierno delincuencial de Alberto Kenya Fujimori que regaló decenas de empresas que luego fueron revendidas muy arriba del precio original?
En casus belli (conflicto), ¿qué puede reclamarle el Estado peruano a una empresa privada monopolio de una potencia de ultramar, China? Harán lo que les venga en gana. ¿Nos quejaremos ante Indecopi, la entidad generosa con bienes ajenos que les obsequió el negocio?
¿Qué hacen nuestros hombres públicos? Están preocupados en sus amparos, recursos, impugnaciones para no perder las pitanzas y enjuagues que han atesorado con la participación de reales delincuentes en el Ministerio Público, Poder Judicial, Congreso, ministerios?
Lóbrega imagen de un Estado que ni siquiera, en Lima al 100% y en el resto del país al 65%, posee la chance de prender la luz, si se la apagan manos misteriosas y enemigas. ¿Los de Indecopi no pensaron en eso?
¡Bah! A esos de Indecopi, a los que se atribuye poderes mágicos porque atienden mal, demoran sus investigaciones, favorecen a los réprobos y lo está comprobando un colega que los denuncia a diario sin respuesta, hay que pasarlos por la pantalla.
¿Cómo así que Indecopi favorece a quienes son denunciados porque no pocos de sus directivos pertenecen a las firmas impugnadas por clientes descontentos?
Reivindiquemos parte central del comunicado de la SNI y que informa Infobae:
“En esta oportunidad, volvió a expresar su preocupación y pidió al Indecopi, dada la complejidad de la operación, publicar en la “brevedad posible” la resolución de dicha autorización”.
Un precedente valioso: “En abril del año pasado, frente al anuncio de la adquisición de Enel Distribución Perú S.A.A. y Enel X Perú S.A.C. por parte de China Southern Power Grid International, desde la Sociedad Nacional de Industrias expresamos públicamente nuestra preocupación, ya que dicha operación representaría una concentración del 100% del mercado eléctrico de Lima en manos de empresas distribuidoras de propiedad del Estado chino”, indicó en su comunicado.
O sea que ¿el desarrollo energético y futuro del Perú en manos de China, ajenas y lejanísimas?
¡Credencial con fotos y apellidos para los traidores y a su señalamiento por las calles!
El silencio acusa a los apóstatas. Así de simple.
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Señal de Alerta
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