El nombre de “cambio climático” domina el discurso relativo a la degradación del ambiente en la Tierra y es empleado desde gobiernos y organizaciones internacionales hasta ambientalistas y público en general, sin embargo, su uso es muy conveniente para los depredadores de la naturaleza, pues minimiza aspectos graves de este asunto.

 

huracan Dorian set 2019

 

La Tierra experimenta “cambio climático” desde sus inicios, millones de años han transcurrido con numerosos cambios climáticos, los cuales están previstos de forma natural y seguirán ocurriendo, siguiendo la dinámica de la estructura terrestre, de modo que el clima cambie debe ser visto como algo natural.

El Diccionario de la lengua española dice que el “cambio climático” es el “cambio previsible en el clima terrestre provocado por la acción humana que da lugar al efecto invernadero y al calentamiento global.”. Así pues, esta expresión se centra en la temperatura, grados más, grados menos.

En teoría, si los tecnólogos lograran desarrollar un dispositivo tan completo y poderoso que sería capaz de regular el cambio climático a un punto de equilibrio en la Tierra, todos deberíamos estar contentos, tranquilos y satisfechos, pero esto no es así.

La realidad de lo que se quiere decir con “cambio climático” abarca hechos más graves y preocupantes y tiene que ver no con un fenómeno natural, sino con la actividad humana, principalmente aquella cuya razón de ser es la codicia y el desprecio por toda clase de vida y ciencia, que causa:

  • Destrucción de la flora
  • Destrucción de la fauna
  • Degradación de la calidad del aire
  • Degradación de la calidad de las aguas
  • Degradación de la calidad de los suelos
  • Degradación de la calidad de los subsuelos
  • En menor grado, contaminación del espacio extraterrestre, por ejemplo, con explosiones en la Luna y otras actividades insulsas.
  • Degradación de la salud humana

Debería emplearse pues una expresión que llame la atención sobre lo más grave de lo que acontece:

Destrucción de la flora

En los últimos años se ha acelerado la destrucción de bosques primarios con la consiguiente pérdida de valiosas especies de árboles, frutos, flores, raíces que podrían ser útiles para la salud, la industria y el bienestar. Muchas especies han desaparecido sin que siquiera se las haya catalogado en la ciencia y menos descubierto sus propiedades.

La agricultura para satisfacer la alimentación de la creciente población no sólo causa la pérdida de hábitat de muchas especies, sino que contamina con pesticidas y fertilizantes.

 

incendio MIchael Dantas WWF

 

Destrucción de la fauna

En forma creciente se extinguen especies de animales terrestres, acuáticos y voladores, parte de los cuales no han sido descubiertos, principalmente por la destrucción de selvas, sabanas, humedales y otros sistemas que crean ambientes propicios para el desarrollo de ciertas especies.

También tenemos la actividad humana “productiva”, como el uso de pesticidas en la agricultura, asentamientos humanos que invaden áreas naturales, caza y pesca indiscriminada, parte de la cual es promovida por China, país que pretende usar los mares internacionales (y hasta invade mares soberanos) para solucionar el problema de alimentación de su numerosa población, que en el siglo pasado experimentó un crecimiento desbocado.

La codicia de grandes transnacionales como Monsanto, Bayer y otras hace que no se prohíban los pesticidas. La ciencia está preparada para desarrollar control de plagas con métodos no venenosos para el ambiente, pero esto no es promovido por los gobiernos de los principales países “desarrollados”. Debido al uso de pesticidas, en muchos lugares del mundo han desaparecido sapos y ranas, anfibios que desde que el hombre se dedicó a la agricultura han ayudado a combatir plagas, pues se alimentan de insectos que destruyen a las plantas.

La falta de decisión del gobierno chino para erradicar creencias basadas en la ignorancia, como en las inexistentes propiedades afrodisiacas de animales salvajes es causa de la caza salvaje y despiadada de tiburones (a los cuales les mutilan las aletas y sangrantes los regresan a sufrir en el mar), caballitos de mar, felinos, reptiles, etc., parte de los cuales son nativos del Perú y otros países de Sudamérica, pero ninguna organización de las llamadas ambientalistas promueve sanciones para China y otros países depredadores.

También tenemos la guerra biológica. Se conoció por ejemplo, que laboratorios de Ucrania financiados por los Estados Unidos estuvieron desarrollando virus para atacar a poblaciones según la raza. Algunos de estos virus serían transmitidos mediante aves migratorias, coincidentemente, hemos conocido una epidemia en las aves migratorias, la cual ha abarcado muchos países y llegó al Perú con un triste panorama de aves marinas muertas, situación que nunca se había dado en nuestra historia. Es obvio que fue una epidemia de creación humana.

 

decomiso caballitos de mar

 

Degradación de la calidad del aire

La actividad industrial, de transporte aéreo y terrestre, las pruebas nucleares y otras han hecho de los aires de toda la Tierra un ambiente en creciente contaminación. Ya no hay aires “puros”, sino aires más o menos contaminados.

A lo anterior se suma la contaminación por ondas de la señales de telecomunicaciones.

Degradación de la calidad de las aguas

La contaminación de ríos, lagos y mares es terrible en muchos lugares, por los desechos plásticos, industriales, cloacas, pesticidas.

Otras actividades que causan grave contaminación de las aguas son la minería ilegal, que vierte mercurio en los ríos después de dragar lechos que dañan el hábitat de peces y otras especies. También la producción de cocaína, que no sólo depreda bosques para sembrar coca, sino que vierte venenos en los ríos. Ello se da principalmente en Sudamérica, donde la DEA parece actuar más de cómplice que de entidad dedicada a combatir este crimen.

Degradación de la calidad de los suelos

Campos agrícolas antaño fértiles, debido a una agricultura descontrolada, han pasado a ser terrenos escasamente productivos, que deben ser enriquecidos con fertilizantes y diversos minerales.

Además tenemos suelos degradados por rellenos sanitarios y botaderos, algunos tan grandes como los del desierto de Atacama en Chile, donde hay basurales que abarcan kilómetros de extensión.

 

avioneta pesticida

 

Degradación de la calidad de los subsuelos

Las napas freáticas que dan vida a campos y pozos de extracción de agua para consumo humano sufren contaminación en diversas partes del mundo, debido al empleo descontrolado de pesticidas y fertilizantes para la agricultura, los cuales se filtran a los subsuelos.

Degradación de la salud humana

Toda la depredación y contaminación del ambiente señalado arriba, finalmente no podrían causar otra cosa que la degradación de la salud humana: los productos animales y vegetales para la alimentación están contaminados con plaguicidas o exceso de fertilizantes. Tenemos los productos orgánicos, pero estos son caros, muy lejos del alcance de sectores populares.

Como si eso fuese poco, también la ética en la salud ha sufrido grave degradación causada por los intereses de grandes transnacionales con la complicidad de gobiernos de los Estados Unidos y Europa, que anteponen el lucro a la salud. Es así, por ejemplo que por priorizar las ganancias de Pfizer y Moderna, se lanzó la seudovacuna contra el COVID-19, sin los controles debidos, la cual es causante desde males menores hasta afecciones cardiovasculares, inmunológicas, cáncer y muerte.

Finalmente, por todo lo señalado, el nombre “cambio climático” debería ser cambiado por uno que recoja la gravedad de la destrucción del ambiente, pero esto choca con los intereses de las industrias depredadoras y con la inacción de diversas ONG ambientalistas.