Después de implorar, ahora los EE. UU. exigen la devolución de documentos publicados por Wikileaks


El Gobierno estadounidense solicitó a la ONG  Wikileaks eliminar de sus archivos y computadoras, los más de 90 mil documentos que revelan la verdadera actuación de las tropas internacionales en Afganistán, que incluye la masacre de civiles y ejecuciones extrajudiciales de líderes talibanes, los cuales, además de su página web, fueron difundidos por cuatro diarios europeos y después por toda la prensa internacional.


Hace unos días, los EE. UU. habían implorado no revelar más de esos documentos, pero hoy el Pentágono exigió a Wikileaks devolver de inmediato  los documentos militares estadounidenses publicados en su página web.
 
Geoff Morrell, vocero del Pentágono, al manifestar la petición de devolución por parte del Departamento de Defensa, dijo que esta difusión de un gran número de documentos “ya ha amenazado la seguridad de nuestras tropas, nuestros aliados y ciudadanos afganos que trabajan con nosotros para traer la paz y la estabilidad en esa parte del mundo".

Esta filtración, la más grande de documentos oficiales de la historia militar estadounidense, detallan cómo una unidad secreta, denominada unidad "negra", tiene como objetivo la búsqueda de los líderes talibán para matarlos o capturarlos sin juicio. También se conoció al menos 144 incidentes donde la coalición invasora mató a civiles disparando contra conductores y motoristas desarmados ante el "temor" de que éstos fueran "terroristas suicidas".

Estos documentos revelan al menos los asesinatos de 195 civiles y 174 heridos como consecuencia de la barbarie desatada en la ocupación de Afganistán. Siendo sólo una muestra de lo que sucede, la lógica indica que el número de víctimas sea mucho mayor, pues los informes diarios de guerra emitidos por las tropas omitían muchos de los incidentes y ataques, o estos informes eran mal recopilados por los analistas militares.

Para defenderse, la administración Obama culpa a George W. Bush de estas prácticas. Los documentos comprenden un periodo de enero de 2004 a  diciembre de 2009".

Las tropas estadounidense iniciaron la invasión de Afganistán el 7 de octubre de 2001, con el nombre de Operación Libertad Duradera, apoyados por tropas británicas, con el pretexto de capturar al cabecilla del grupo Al Qaeda, Osama Bin Laden, acusado por EE. UU. de ser el autor intelectual de los ataques del 11 de septiembre en la ciudad de Nueva York, el cual presuntamente era sostenido por el Gobierno talibán.

Pero Obama, que prometió en campaña presidencial retirar las tropas de Afganistán, en diciembre del año 2009 anunció el envío de 30 mil soldados más, los cuales, sumados a los invasores en ese lugar, totalizan 100 mil militares.

Según la  Organización de las Naciones Unidas (ONU), más de 2 mil 400 civiles murieron en el 2009, en el año en que presuntamente hubo más víctimas  desde el inicio de la invasión a Afganistán.