California decide sobre marihuana; América Latina teme impacto

La eventual legalización de la marihuana en California hoy es una de las consultas populares que más expectativas despertó en Estados Unidos y en América Latina, donde presidentes de países productores temen el impacto de este voto para regularizar el cannabis.

De ser aprobada la llamada Propuesta 19, la marihuana en California gozaría de una regularización que la equiparía al tabaco y al alcohol en un Estado donde el cultivo y la venta del cannabis con fines medicinales es legal desde 1996.

Sin embargo los sondeos dan pocas esperanzas a quienes se inclinan por la legalización global del cultivo, el comercio y el consumo de marihuana.

La última encuesta realizada por el diario Los Angeles Times y la Universidad del Sur de California (USC) indicó que 51% de los votantes estaría en contra de la legalización y 39% a favor de la medida.

 No obstante la polémica está servida y la iniciativa levantó inquitudes entre los presidentes de México, Colombia y América Central que han venido advirtiendo sobre la falta de "coherencia" que podría suponer para Estados Unidos la legalización de la marihuana en su política antidroga en la región.

"Nadie entiende que un país pueda legalizar internamente la producción, el tráfico y el consumo, y al mismo tiempo criminalizar" las drogas, dijo el presidente colombiano Juan Manuel Santos en acto el sábado tras enfatizar que un eventual triunfo del ´sí´ señalaría la "incoherencia" de Estados Unidos.

Las autoridades mexicanas, que libran una batalla sangrienta contra los cárteles de la droga, se han expresado en el mismo sentido sobre el referéndum californiano y han argumentado que los cárteles no sólo se dedican al tráfico de la marihuana, sino también de cocaína y metanfetaminas, además de incurrir en otros graves delitos como el secuestro, extorsión y homicidio.

"No se puede criminalizar y legalizar al mismo tiempo", advirtió la semana pasada el presidente mexicano, Felipe Calderón, en referencia a las campañas antidroga que Estados Unidos fomenta en países de la región.

Los cárteles mexicanos luchan por controlar las zonas de producción así como las rutas hacia Estados Unidos, con un saldo de más de 28.000 muertos desde diciembre de 2006, cuando el presidente Calderón asumió el poder y mandó a unos 50.000 militares a enfrentarlas.

Estas inquietudes llevaron al subsecretario de Defensa estadounidense para América Latina, Frank Mora, a afirmar el lunes que independientemente del resultado electoral en California, Washington no cambiará su política antidrogas.

Washington reconoce la "corresponsabilidad" y la "deuda" con los países latinoamericanos en la lucha contra las drogas, dijo.

Al margen de las aprensiones en el extranjero, en California la campaña a favor de la legalización del cannabis recaudó más de 4,2 millones de dólares de donantes tan prominentes como el millonario estadounidense de origen húngaro George Soros y los cofundadores de la red social Facebook, Dustin Moskovitz y Sean Parker.

"Regular y gravar la marihuana podría simultáneamente ahorrarle a quienes pagan impuestos miles de millones de dólares en fuerzas de seguridad y encarcelaciones costosas (...)", sostuvo Soros la semana pasada.

Para Soros un impuesto al consumo del cannabis "reduciría la delincuencia, la violencia y la corrupción asociadas a los mercados de las drogas, así como las violaciones de las libertades civiles y de los derechos humanos que se producen cuando un gran número de llamados ciudadanos respetuosos de la ley están sujetos a arresto. A cambio, la policía podría centrarse en los delitos graves".

La Proposición 19 permitirá a los californianos mayores de 21 años poseer hasta una onza (28,35 gramos) de marihuana y cultivar una superficie máxima de 2,34 metros cuadrados.

El cultivo a gran escala y su comercialización -así como su carga tributaria- también sería aprobada, pero su puesta en práctica quedaría a discreción de las ciudades y los condados. (Con informaciòn de El País de Uruguay)