Blindados en acción (fracaso estadounidense  en Iraq)

Los estadounidenses consideran que su tanque Abrams es el mejor del mundo y, aparentemente, lo demuestran: la campaña militar que culminó con la ocupación de Iraq y el derrocamiento del gobierno de Saddam Hussein mostraban una sucesión de batallas con resultado favorable a los yanquis. Eso se vio por televisión.

Con un dominio completo del aire los blindados estadounidenses y de sus aliados arrasaron con todo, desintegraron al ejército regular de Iraq, y con la ocupación de la capital, Bagdad, proclamaron victoria.

Sin embargo, en realidad sólo se trató de una fase inicial victoriosa; y luego vino la lucha de la resistencia armada iraquí, que continúa hasta hoy. En retrospectiva, se puede decir que la victoria ante la fuerza armada iraquí marcó el inicio de otra guerra, la guerra irregular o asimétrica de resultado hasta hoy incierto. Los enormes costos del conflicto armado y la dificultad de justificar políticamente esa aventura han determinado que los estadounidenses ya hayan establecido un plan de retirada; pero saben que una vez que se vayan ellos el gobierno títere no aguantará ni un mes la arremetida de los nacionalistas iraquíes, que castigarán a los vendepatrias colaboradores del invasor.

El tanque Abrams, del que tanto se precian los yanquis, se ha convertido en víctima predilecta de la resistencia, que los destruye con proyectiles antitanque o con cargas explosivas disimuladas en los caminos. En el siguiente enlace de YouTube se puede ver un gran número de tanques destruidos, con daños de toda clase, incluso con la torreta volada, pese a su apariencia de solidez. Ver en

http://www.youtube.com/watch?v=CUvoaD6Vnkg&feature=related