Robert David Steele, exespía de la CIA, exmilitar de la infantería de marina de los Estados Unidos y activista del Open Source Everything Engineering (OSEE), asegura que el incendio de la catedral de Notre-Dame de París fue no sólo intencional, sino un ritual satánico promovido por el propio presidente francés Emmanuel Macron.
Ya se sabe que para la hora de inicio del incendio, los trabajadores a cargo de la restauración del techo de la catedral ya se habían retirado del lugar.
En una entrevista publicada por Veterans Today, sitio web de militares retirados independientes estadounidenses, Steele señala hechos que fundamentan sus afirmaciones e indica que, de acuerdo con sus fuentes:
- Un jesuita francés tomó declaraciones del personal de la catedral que asegura que el incendio fue intencional
- En el lugar fueron hallados dos cadáveres con balazos en la cabeza, hecho no verificado, pero creíble, teniendo en cuenta sus fuentes
- También señala que había una restauración a la que califica de “simbólica”, por la cual se retiraron de la catedral piezas valiosas antes del incendio
- Además, sostiene que la operación contra el fuego fue simulada, pues al mismo tiempo dejaban quemarse el monumento religioso y cultural más importante de Francia
¿Por qué un acto satánico?
Aparte de asegurar que Macron es satánico, Steele subraya que extrañamente al mismo tiempo el fuego consumía los cuatro lados de la catedral, en forma de cruz, lo cual es una ofrenda perfecta al diablo, la toma desde arriba muestra una cruz en llamas, como se ve en la foto, en clara profanación satánica.
Acusa de ser satanistas también a las cabezas de gobierno de Alemania y el Reino Unido, Angela Merkel y Theresa May, quienes estarían al tanto del acto y les convenía, por los serios problemas políticos que están atravesando.
El exespía explica que Notre-Dame no es propiedad de la Iglesia, sino del Estado, que estuvo rechazando pedidos de la Iglesia para realizar renovaciones necesarias para mantener el monumento a salvo para los ciudadanos y el turismo y a la vez proteger las reliquias valiosas. Y Notre- Dame no tenía seguro.
Apunta a que los Obama sabían que se produciría el incendio
Steele destaca el hecho de que cuando Notre-Dame se incendiaba Michel Obama podía ver el siniestro desde una embarcación en el río Sena y asemeja el hecho a que los Rotschild tenían una suite desde donde miraron el ataque a las Torres Gemelas en 2011 (atentado que no sería tal sino un acto provocado por el poder estadounidense en la sombra) mientras desayunaban en su balcón y asegura que los Obama son “propiedad” de los Rotschild.
Como se recuerda, también el entonces presidente George Bush continuó leyendo un cuento en una escuela cuando le notificaron sobre el ataque a las Torres Gemelas, hecho interpretado por diversos analistas como una señal clara de que estaba enterado previamente de lo que iba a suceder.
Para Steele, la “investigación” sobre el siniestro en la catedral está totalmente controlada y lo más probable es que terminen acusando de negligente a la empresa encargada de la restauración que se efectuaba allí. El Estado, asegura, no investigará como se debe, de la misma manera que sucedió con el asesinato de John F. Kennerdy.
¿Cómo habría ardido tan rápido todo el techo?
Se habría rociado con líquido o polvo incendiario el maderamen del siglo XIII. En cuanto a los dos muertos, los habrían asesinado por haber querido evitar que se prenda fuego a la catedral.
Para reforzar sus afirmaciones, Steele cita al jefe arquitecto de Notre-Dame, quien públicamente declaró que no fue un accidente, pues no había soldaduras u otras causas posibles y que la madera de 800 años es como roca petrificada, la cual es imposible que arda a menos que le coloquen una sustancia para que arda.
Otros han comentado sobre la posibilidad de que un arma dirigida haya sido usada además de las sustancias incendiarias para asegurar que se prenda el fuego completo a la vez y tome la forma de una cruz visible desde el espacio, como demanda un ritual satánico para profanar un sitio santo.
Tras el incendio, hay gente extremadamente rica que está tan furiosa con este hecho que ha jurado no escatimar ningún gasto para llegar a la verdad sobre la causa, dice Steele y agrega que el grupo neonazi NATO GLADIO está en la lista de sospechosos.
Steele comenta que el mundo está en guerra en tres niveles: secular, ecológica y espiritual y que el “Estado Profundo” (relacionado con este presunto atentado) está perdiendo estas guerras porque la gente está despertando y cita el ejemplo de las ondas 5G, pues la gente entiende que es una tecnología cuyo propósito básico es genocida y ecocida además de ser una herramienta de control además de sus mortales efectos contra los tejidos vivos. El sistema 5G permite racionar el efectivo, la energía, la comida y el agua a nivel individual sostiene y recuerda que esto será motivo debate en la elecciones estadounidenses de 2020.
En cuanto al plano espiritual, destaca el surgimiento de los pueblos indígenas y su conexión con la Madre Tierra y la energía positiva del cosmos.
