—Un estudio de la Universidad de Washington ha encontrado la posibilidad de detectar la enfermedad en personas sin síntomas
—En España, la enfermedad de Alzheimer afecta a más de seis millones de personas

Un nuevo estudio de los investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis (Estados Unidos), ha detectado que mediante una tecnología similar a la empleada en los consultorios oftalmológicos, se pueden detectar evidencias tempranas que delaten un principio de alzhéimer en pacientes mayores sin síntomas de la enfermedad.

El estudio publicado en la revista Journal of the Medical Association Ophthalmology ha involucrado a 30 pacientes y sus autores aseguran que, en el futuro, podría ser posible detectar la enfermedad de Alzheimer mediante un simple examen de la vista. Esta patología, la forma más común de demencia, afecta aproximadamente a 5,4 millones de residentes de EE.UU., y en España a más de seis millones de personas.

"Esta técnica tiene un gran potencial para convertirse en una herramienta de detección para decidir quién debe someterse a pruebas más concretas de alzhéimer antes de la aparición de los síntomas clínicos. Nuestra esperanza es utilizar esta técnica para detectar quién está acumulando proteínas anormales en el cerebro que pueden provocar el desarrollo de alzhéimer", explica Bliss E. O'Bryhim, médico residente en el departamento de Oftalmología y Ciencias Visuales y primer autor del estudio.

El daño cerebral aparece años antes que los síntomas

Un daño cerebral significativo, causado por la enfermedad de Alzheimer, puede ocurrir años antes de que aparezcan síntomas como la pérdida de memoria o el deterioro cognitivo. Los científicos estiman que las placas relacionadas con el alzhéimer pueden acumularse en el cerebro dos décadas antes del inicio de los síntomas. En la actualidad, los médicos utilizan la tomografía por emisión de positrones (PET) y punciones lumbares para ayudar a diagnosticar esta enfermedad, pero son pruebas "muy caras e invasivas", declara el científico.

Investigaciones precedentes habían detectado que los ojos de personas que habían muerto de alzhéimer mostraban signos de adelgazamiento en el centro de la retina y degradación del nervio óptico. Ahora, en este nuevo estudio, se ha utilizado una técnica llamada angiografía de retina por tomografía de coherencia óptica, que ha servido para examinar las retinas de los participantes. La edad promedio de estas personas es de 70 años y sin ningún síntoma clínico de alzhéimer.

Estos participantes eran pacientes del Proyecto de Memoria y Envejecimiento del Centro de Investigación de la Enfermedad de Alzheimer Knight de la Universidad de Washington. Alrededor de la mitad de los que participaron en el estudio tenían niveles elevados de las proteínas de la enfermedad de Alzheimer, amiloide o tau, según revelan las exploraciones. Esto sugiere que, aunque no tenían síntomas, probablemente desarrollarían alzhéimer.

En el centro de la retina y el nervio óptico

"En los pacientes con niveles elevados de amiloide o tau, detectamos adelgazamiento significativo en el centro de la retina. Todos nosotros tenemos una pequeña área desprovista de vasos sanguíneos en el centro de nuestras retinas que es responsable de la visión más precisa. Descubrimos que esta zona, que carecía de vasos sanguíneos, se amplió significativamente en personas con enfermedad de Alzheimer preclínica", explica el investigador, Rajendra S. Apte.

La prueba ocular utilizada en el estudio, común en las consultas de los oftalmólogos, ilumina el ojo con luz, lo que permite al médico medir el grosor de la retina, así como el grosor de las fibras en el nervio óptico. Para este estudio, sin embargo, los investigadores han agregado un nuevo componente a la prueba: la angiografía, que permite a los médicos distinguir los glóbulos rojos de otros tejidos en la retina.

Los investigadores reconocen que se necesitan más estudios para replicar los hallazgos, pero puntualizan que "es posible que un día se pueda detectar el riesgo de contraer esta enfermedad en personas tan jóvenes como de 40 años o 50 años", concluye Apte.

 

RTVE, 28.08.2018