Otárola denuncia desaparición de laguna Conococha

En foro sobre consecuencias de la explotación minera en Ancash


El congresista Fredy Otárola Peñaranda (GPN) denunció la desaparición de la laguna Conococha en Áncash, como consecuencia de la exploración minera a cargo de la empresa Chancadora Centauro, situación que agravará la contaminación de las aguas, aires y la extinción  de la fauna y la especie de aves que existe en la zona.


En el foro “Consecuencias de la explotación minera en la laguna de Conococha”, desarrollado ayer  en el auditorio José Faustino Sánchez Carrión, Otárola lanzó la advertencia en presencia  de los alcaldes provinciales de Bolognesi y Recuay, además de representantes del Frente de Defensa de la Comunidad de Huambo, entre otras autoridades.

Otárola explicó que la laguna de Conococha es cabecera de tres cuencas: los ríos Santa, Fortaleza y Pativilca. Dijo que la explotación minera pone en peligro la vasta riqueza forestal y fauna que existe en la zona, además de contaminar el agua que llega a las provincias ancahinas.

“Quieren destruir lo más bello de Ancash. Ya no tenemos nevados, ahora quieren desaparecer nuestra laguna. Esto no lo vamos a permitir”, dijo.

Señaló que no hay un estudio serio de impacto ambiental para llevar a cabo este proyecto minero, al denunciar que se está presionando a las comunidades a fin de que den el visto bueno para el inicio de estas actividades.

Agregó que proyectos mineros como La Oroya han tenido impactos negativos en la salud de los pobladores, al recordar la contaminación de niños con plomo en la sangre.

Dijo que el caso de la empresa minera Antamina es singular, al señalar que esta compañía invirtió cerca de 6 mil millones de dólares para recuperar su inversión en 20 años. Sin embargo, por el alza del precio de los minerales, la recuperó en sólo cuatro años. Dijo que ahora pretenden aumentar su producción en un 40% contaminando las aguas en la zona.

Finalmente anunció que su despacho coordinará con las autoridades y dirigentes de las comunidades para defender a la laguna de Conococha frente a la pretensión de usar esas aguas para proyectos de explotación minera a tajo abierto.