La constructora brasileña utilizó el estudio de arquitectura madrileño DSC Workshop de Juan Lago-Novás para pagar sobornos en Perú, Ecuador, Guatemala y Brasil.

Odebrecht

La empresa constructora brasileña, Odebrecht, habría utilizado a una pequeña empresa española para mover 34 millones de dólares (28 millones de euros) para presuntamente pagar comisiones ilegales a políticos y altos funcionarios de Perú, Ecuador, Guatemala y Brasil.

Según un informe confidencial de la Policía de Andorra al que ha tenido acceso el diario El País de España en noviembre pasado, Odebrecht se sirvió del estudio de arquitectura madrileño DSC Workshop de Juan Lago-Novás para “canalizar” los sobornos que cobraron supuestamente los altos funcionarios de Latinoamérica a cambio de la adjudicación de millonarios proyectos.

Lago-Novás habría abierto una cuenta en la Banca Privada d’Andorra (BPA), un país de 78 mil habitantes regido, hasta el año pasado, por el secreto bancario.

Los millonarios movimientos que hacia el despacho de arquitectura madrileño les dejaba como ganancia una comisión del 3 % por su papel de “puente” o “pasarela” de los fondos, que ejecutó entre 2010 y 2012, según los investigadores.

Descargos

Como descargo de su responsabilidad, los dueños de DSC Workshop asegurando que fueron “utilizados”, pues no estaban enterados de que los pagos no eran legales. “El estudio ha servido de puente sin saber qué había detrás de esos pagos. Entonces, nadie sospechaba de Odebrecht, una multinacional donde todos querían trabajar”, aseguraron.

Según el diario La República, los empresarios también informaron que Lago-Novás recibió 200 mil euros por redactar un informe técnico sobre la presa ecuatoriana Multipropósito Baba y subcontratar a la empresa que ejecutó la obra.

El equipo de DSC Workshop reveló que “el dinero es lícito, viene del grupo, y los pagos a los subcontratistas son automáticos. Nunca sospechamos que se iban a utilizar en corrupción política”.

 

Diario Uno, 10.03.2018