Coralith García Apac, investigadora principal de la Universidad Cayetano Heredia (UPCH) se presentó a reponder por el escándalo en torno a la eficacia de la vacuna Sinopharm contra el coronavirus y su actitud fue evasiva y poco transparente al respodenr sólo en parte los cuestionamientos, por lo cual arrojó todavía más sombras sobre el caso y sólo fue defendida por el congresista morado Daniel Olivares, que hizo de escudero del gobierno morado.
Los integrantes miembros de la Comisión Especial de Seguimiento a Emergencias y Gestión de Riesgo de Desastre COVID-19, expresaron su desconfianza a la vacuna de Sinopharm que en estos momentos se aplica en nuestro país, por lo que solicitaron acelerar los informes de los ensayos clínicos a fin de que se pueda obtener los porcentajes de eficacia de las mismas.
En sesión virtual de hoy domingo 7, García Apac fue la protagonista, con la participación secundaria d Eduardo Ticona Chávez, profesor de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM). Ambos expusieron sobre evaluación del reporte preliminar de los resultados del ensayo clínico de la vacuna contra el coronavirus, desarrollada por el laboratorio de Sinopharm, entre otros puntos.
El legislador Carlos Mesía Ramírez (Fuerza Popular) dijo que la vacuna que se viene aplicando en estos momentos es un paliativo, toda vez, que no se ha demostrado que la misma previene la enfermedad, sino por el contrario solo aminora el efecto del virus.
“Tengo entendido que la vacuna de Beijing tiene una efectividad del 33%, esto hace referencia a la capacidad de inmunizar frente al contagio, entonces si a la fecha la vacuna Sinopharm solo tiene efectividad del 33%, esto quiere decir que no pasa los estándares mínimos de la Organización Mundial de la Salud. ¿Por qué se compra vacuna que en nuestro país no está dentro de los estándares internacionales del 50% para arriba”, preguntó Mesía Ramírez.
En la misma línea, Wilmer Cayllahua Barrientos (Frepap) señaló que ahora que el Perú está negociando con Sinopharm la compra de 38 millones de dosis de vacunas, de las cuales ya se aplicó al personal de salud a nivel nacional, no se puede confiar en que esas vacunas mantendrán a la población segura, toda vez que pueden contagiar a su entorno familiar.
“Si un trabajador de la salud se vacuna, meses después puede desarrollar el coronavirus, porque no queda al 100% prevenido, su entorno familiar corre el riesgo de ser infectado por el virus”, dijo.
El parlamentario Otto Guibovich Arteaga (Acción Popular) expresó que hay mucho desconcierto en la población por las cifras presentadas en lo que se refiere a la eficacia y seguridad de la vacuna o ensayo que se viene aplicando en nuestro país a la población de primera línea.
“Es necesario que se explique con un lenguaje claro a la población el nivel de eficacia alcanzada de la vacuna, decirles cuál es el nivel de protección que se tiene. Queremos certezas, que la población entienda que es lo que está pasando, aún quedan muchas dudas, y por el bien de la ciencia y las universidades encargadas del estudio clínico se debe hablar con claridad que la población lo entienda”, dijo.
Posemoscrowte Chagua Payano (Unión Por el Perú) solicitó la renuncia inmediata de los investigadores de ambas universidades que tienen a cargo los ensayos clínicos preliminares, pues considera que el informe ya está viciado y que ha perdido la confianza de la sociedad.
“Ustedes como autoridades deberían hacerles bien a sus universidades y dar un paso al costado, esto es un acto vergonzoso y deben abstenerse de terminar con ese ensayo, esos estudios deben pasar a manos de una auditoría extranjera totalmente neutral e imparcial. Todas las cifras dadas pueden estar manejadas para que la población no sepa la verdad porque son millones los que se han comprometido”, indicó.
La congresista Tania Rodas Malca (Alianza Para el Progreso) dijo que los estudios que se vienen realizando en las dos universidades no están claras, toda vez, que hay profesionales de la salud que han recibido la segunda dosis y esperan aún una respuesta preliminar de los resultados de los ensayos clínicos que se vienen haciendo en nuestro país.
Por su parte, la investigadora principal de la Universidad Cayetano Heredia dijo que la vacuna de Beijing que se está aplicando al personal de salud de primera línea no impide el contagio, este personal se puede contagiar, afirmó
“La vacuna no impide el contagio, el médico o enfermera contagiada al llegar a su casa, puede contagiar a su entorno”, indicó.
Sin embargo, sostuvo que las personas que recibieron esta dosis presentan un 91% de eficacia frente a síntomas graves que deriven en hospitalización del paciente.
“Los resultados obtenidos en Beijing fueron mejores que la de Wuhan, estos mejores resultados se ven en los menores riesgos de desarrollo grave e la enfermedad. La vacuna que se usa en la fase 1 de vacunación en nuestro país es la vacuna Beijing que ofrece muchas ventajas para prevenir las formas graves de la enfermedad”, dijo.
La Comisión Especial también escuchó la ponencia de César Cabezas Sánchez, jefe del Instituto Nacional de Salud (INS) del Minsa, quien expuso sobre el estado situacional del ensayo clínico de la vacuna contra el coronavirus desarrollada por el laboratorio de Sinopharm.
MOCIÓN DE ORDEN
Finalmente, el grupo de trabajo que preside el congresista Leonardo Inga Sales, informó que presentarán una moción de orden del día, que propone exhortar al Poder Ejecutivo a que en el más breve plazo se contrate los servicios de una entidad auditora internacional de reconocido prestigio académico mundial, a efecto de que se le encargue efectuar una auditoría externa científica al ensayo clínico de la vacuna Sinopharm cepa Beijing y cepa Wuhan cuyo patrocinador en nuestro país es la Universidad Cayetano Heredia.
La moción debe ser presentada este lunes 8 de marzo ante el Pleno del Congreso para su debate y posterior aprobación.
