Campaña demanda no derrochar agua en carnavales


En muchas ciudades de nuestro país, la costumbre de celebrar los carnavales está asociada a una práctica irresponsable por parte de algunas personas quienes desperdician el agua potable arrojándola contra otras personas en calles, vehículos de transporte público y hasta en centros de trabajo.


Por ello, la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass) unida con las entidades prestadoras del servicio de agua de las ciudades de Ica, Chiclayo, Trujillo, Piura y Tumbes ; así como las municipalidades de Villa María el Triunfo, Villa El Salvador, Comas y Puente Piedra de la ciudad de Lima, están preparando una campaña de sensibilización denominada “ En carnavales…no tires el agua, ahórrala”  dirigida a la población en general con el objetivo de enseñar no solo a cuidar el recurso sino a vigilar del correcto uso del mismo. Las campañas suponen un conjunto de actividades como el desarrollo de montajes teatrales, charlas, microprogramas radiales, exposición de videos, pasacalles y distribución de material educativo e informativo.

Con la campaña “En carnavales...no tires el agua, ahórrala”, durante el mes de febrero se desplegará un esfuerzo conjunto entre el Regulador, empresas de agua y municipalidades, lo que permitirá educar a la población y reducir el derroche que se hace con el agua potable durante estas festividades, mojando a las personas muchas veces contra su voluntad y que en otros casos, sirven de escenario a delincuentes, quienes utilizan la excusa del juego de carnavales para cometer asaltos y robos.

Derroche de agua en ciudades desérticas

El gerente de usuarios (e) de Sunass, Carlos Benites, sostiene que se ha elegido para desarrollar la campaña, las ciudades en la Costa Norte porque “en estos lugares es donde se existe la costumbre de celebrar los carnavales haciendo derroche de agua y, en el caso de Lima, hemos coordinado acciones con municipios de los conos de la ciudad, pues son éstos los que tienen problemas de restricción del servicio por lo que es muy importante que cuiden el recurso; la idea es revertir la paradójica situación a la que nos enfrentamos todos los veranos cuando con mucha indignación observamos que precisamente donde más escasea el agua, más derroche se produce”.

El derroche de agua es un acto irresponsable, agravado por el contexto mundial de escases del recurso y por las restricciones que muchos ciudadanos del mundo y particularmente compatriotas nuestros, aun tienen para acceder a este importante servicio. Resulta irónico y preocupante que estas prácticas equivocadas se presenten en ciudades como Lima y otras de la costa norte, caracterizadas por ser zonas desérticas con pocos afluentes de agua dulce, y por tanto las más vulnerables a sufrir de estrés hídrico.