Vestido de Kate Middleton inspirado en el de Grace de Mónaco

El vestido de Kate Middleton, secreto guardado hasta el día de la boda con el príncipe William, finalmente mostró ser inspirado en el de la desaparecida princesa Grace de Mónaco.

 

 

De color marfil y confeccionado en satén, el diseño estuvo a cargo de Sarah Burton, de Alexander MxQueen, y destacó por su sobriedad y elegancia, que aprovechó la delgadez y la estrecha cintura de la novia, que contrastó con la amplia falda.

La parte superior fue de encaje pegado al sus hombros y sus brazos, diferenciándose del vestido de Grace de Mónaco por el cuello en “V” y otros detalles menores.

La novia, que partió del hotel Goring, lució una diadema de diamantes Cartier que perteneció a la reina madre y un par de aretes de diamantes diseñados con la forma de su escudo de armas, regalo de sus padres.

El vestido de Grace



 

El velo fue simple y pequeño, de tul de seda adornado con flores, que le llegaba hasta algo más abajo de la cintura.

Adornaban el vestido pequeñas flores hechas en tul de seda hechas a mano. La cola fue mediana, de 2.7 metros.

Los zapatos de Kate fueron hechos a mano, de satén marfil, bordados por la Real Escuela de Costura de Hampton Court Palace, con taco de unos 6 centímetros.

Finalmente, su ramillete también fue sencillo y pequeño, que incluyó mirtos de la mata original plantada por la reina Victoria en la casa Osborne, en la Isla de Wight, en 1845, y un brote de una planta de mirto usada en la boda de la reina Elizabeth en 1947.


 

El diseño del ramillete, así como la decoración vegetal de la Abadía de Westminster, estuvo a cargo de Shane Connoly.

 

Este vestido es sin duda mucho más elegante que el de la boda de la princesa Diana, que lució demasiado abultado.

En cambio, el uniforme elegido por el príncipe William estuvo de colores demasiado chillones. Lució algo calvo en la parte posterior de la cabeza, lo que indica que no recurre a métodos para hacer crecer el cabello.