El 'John Stennis' zarpa rumbo a las aguas del Golfo Pérsico.

Una potente flotilla de buques de guerra encabezada por el portaaviones nuclear ‘John Stennis’ zarpó rumbo al Golfo Pérsico para "afrontar las amenazas" que representan Irán y el conflicto en Siria, según el jefe del Pentágono.

El portaviones 'John C. Stennis' de propulsión nuclear, que tiene una tripulación de unos 5.500 marineros y va acompañado por buques escoltas de combate y un submarino nuclear, zarpó este martes de la base naval de Kitsap en Bremerton, en el estado de Washington (costa oeste) rumbo al Golfo Pérsico.

El Golfo Pérsico, bajo la lupa de EE.UU.

El 'Stennis' se dirigió a aguas del Golfo Pérsico "cuatro meses antes de lo previsto", anunció el secretario de Defensa de EE.UU., Leon Panetta.

Actualmente hay dos buques de guerra estadounidenses en la región del Golfo, uno de ellos, el portaaviones ‘Enterprise’, está previsto que vuelva a finales de verano: el portaaviones ‘Stennins’ ocupará su lugar.

Según expertos militares, la política de Washington es mantener sus portaaviones en la zona y evitar que haya un periodo de transición con un solo portaaviones, teniendo en cuenta la salida y entrada de los reemplazos.

Irán y Siria: "amenazas"

En víspera de la expedición del 'Stennis', el jefe del Pentágono manifestó en la base naval de Kitsap que EE.UU. se prepara para "afrontar amenazas" en el Golfo Pérsico, tales como las aspiraciones nucleares de Irán y el conflicto en Siria.

El grupo de combate del 'Stennis' "protegerá de una serie de amenazas" la región del Golfo Pérsico y, "obviamente Irán es una de esas amenazas", declaró Panetta, que agregó que las "ambiciones de Irán" son una preocupación, así como su amenaza de cerrar el paso a los petroleros que pasan por el Estrecho de Ormuz.

Asimismo, Panetta, dijo que entre las preocupaciones de su departamento está la situación en Siria que -reconoció- "también estamos siguiendo de cerca".

La atención principal de Washington en Siria se centra en la asistencia humanitaria a los refugiados -aseguró el jefe del Pentágono-, así como en la vigilancia del arsenal de armas químicas y la asistencia no letal a las fuerzas de la oposición.

Es importante recordar que por el Estrecho de Ormuz pasa más del 35% del petróleo en bruto transportado por vía marítima en todo el mundo.

Irán no quiere ver a este portaaviones

Mientras tanto, Irán ha amenazado en repetidas ocasiones con cerrar el estrecho de Ormuz si se ve amenazado con ataques por parte de EE.UU.

El jefe del Ejército iraní, el general mayor Ataollah Salehi, exigió anteriormente a EE.UU. que no enviara el portaaviones 'John C. Stennis' al Golfo Pérsico por considerarlo un peligro para la estabilidad en la zona. "Le aconsejamos precaución y recomendamos [a la Marina de EE.UU.] no volver con este portaaviones al Golfo Pérsico", subrayó Salehi. "No tenemos costumbre de insistir en las advertencias y advertimos sólo una vez", agregó.

En su respuesta, Panetta declaró que si Irán bloquea Ormuz, EE.UU. responderá con uso de la fuerza. "Eso es una línea roja que no dejaremos que se cruce", dijo el jefe del Pentágono.

También el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de EE.UU., general Martin Dempsey, ha declarado junto a Panetta, que el estrecho de Ormuz “no se cerrará nunca”.   

Russia Today en Español, 28-08-2012