Cristina Fernandez 6La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, planteó la posibilidad de que la muerte del fiscal general del caso AMIA, Alberto Nisman, no haya sido suicidio, sino asesinato y solicitó una investigación a su personal de resguardo.

La mandataria aseguró que la acusación de Nisman contra ella, de haber encubierto a los autores del atentado contra la mutual judía AMIA, no tiene ningún sustento, por lo cual el fiscal pudo haber sido asesinado para culpar de su muerte a su Gobierno para

"La denuncia del Fiscal Nisman nunca fue en sí misma la verdadera operación contra el gobierno. Se derrumbaba a poco de andar. Nisman no lo sabía y probablemente no lo supo nunca. La verdadera operación contra el Gobierno era la muerte del Fiscal después de acusar a la Presidenta, a su Canciller y al Secretario General de La Cámpora de ser encubridores de los iraníes acusados por el atentado terrorista de la AMIA", escribió  en su web.

Como se sabe, Nisman fue usado por los Estados Unidos para una campaña contra su gobierno con motivo de su investigación del atentado, de allí que extrañas manos habrían causado su muerte para dar su zarpazo a la democracia argentina, por eso Fernández sostiene que lo usaron vivo y después lo necesitaban muerto.

"Lo usaron vivo y después lo necesitaban muerto. Así de triste y terrible", dijo y subrayó que ella ya dudaba de que sea un suicidio, como escribió el 19 de enero, con signo de interrogación: "¿Suicidio?". "Hoy no tengo pruebas, pero tampoco tengo dudas", subraya la presidenta, al referirse a la misteriosa muerte del hombre en su propia bañera.

Fernández de Kirchner sostiene que los agentes involucrados "nunca habían pertenecido a la Secretaría de Inteligencia" y que el Gobierno argentino "nunca compró petróleo a Irán". "La acusación de Nisman no solo se derrumba, sino que constituye un verdadero escándalo político y jurídico", advierte Fernández.

Una de las revelaciones de Wikileaks indica un interés malsano de la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, quien pidió a sus servicios secretos informes médicos sobre la presidenta Fernández, lo cual abona a la teoría de la preparación de algún plan contra su gobierno.

 

 

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