Amy Goodman y Denis Moynihan

Mientras la intervención militar del Presidente Barack Obama en Siria parece haberse postergado por el momento, llama la atención que el Secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, se haya reunido el 11 de septiembre con uno de sus predecesores, Henry Kissinger, supuestamente para hablar de la estrategia de las próximas negociaciones sobre Siria con funcionarios rusos. La reunión entre Kerry y Kissinger y la oposición pública al ataque a Siria, que ambos apoyan, deberían mirarse a través del espejo de lo sucedido el 11 de septiembre, pero de 1973.

”La revolución en Siria perdió su camino y se convirtió en propiedad de fanáticos y bandidos”, comenta el corresponsal del diario italiano La Stampa, Domenico Quirico, quien pasó 152 días como rehén de los rebeldes sirios.

“Siria se convirtió en un país donde el mal triunfa y prospera y donde muestra todos sus aspectos: la codicia, el odio, el fanatismo y la ausencia de misericordia. En este lugar, cuando un rehén llora todo el mundo se ríe observando el espectáculo de su dolor y lo ve como una señal de su debilidad”, escribió Quirico en La Stampa tras salir del cautiverio y volver a su país natal.

El conflicto interno e internacional que se desarrolla en Siria ha estado marcado la semana pasada por un acontecimiento que varió el panorama. Basándose en no probadas acusaciones contra el régimen sirio de Bashar al-Assad de haber utilizado armas químicas, el gobierno de los EE. UU. anunció que iba a bombardear siria.

Vicky Peláez

La moderación y la prudencia pueden hacer y corregir muchas cosas (Carl Friedrich Zelter, 1758-1832)

Cuando ya el presidente de los Estados Unidos Barack Obama estaba por desatar su descabellado “ataque limitado” contra Siria, poniendo en peligro no solamente al Oriente Medio sino la paz en el mundo entero, apareció como por milagro la propuesta del presidente de Rusia, Vladimir Putin, de desmantelar el arsenal químico de Siria y así acabar con los pretextos para una nueva guerra inminente en la región.

canal de panamaFermín Góndola2013-09-12 — 3:56:00 PM —

Sobre el diferendo colombo-nicaragüense y la posición panameña, resulta extraño que el gobierno panameño esté involucrando los intereses del Estado panameño en todo tipo de conflictos, sean estos de carácter internacional o regional, sin que se haya hecho un estudio concienzudo por especialistas en la materia. En el diferendo entre las dos hermanas repúblicas de Nicaragua y Colombia, la posición adoptada por el gobierno panameño a todas luces destaca un desconocimiento total de lo que es el derecho marítimo internacional y el estricto apego a lo contemplado en la Convención de Montego-Bay, que es ley de la República de Panamá.