El retorno de la fuerza
Por Alberto Piris (*)
Hace ya cierto tiempo que algunos de los que veníamos, ingenuamente, recabando el respeto a la legislación internacional y propugnábamos la renovación y el fortalecimiento del único organismo capaz de ejercer cierta autoridad universal al respecto, Naciones Unidas, hemos empezado, mal que nos pese, a abandonar tan utópico idealismo. Las lecciones del pragmatismo más realista que pueda imaginarse se acumulan una tras otra y demuestran que, a la larga, la única Ley que rige en el sistema internacional de los Estados sigue siendo la fuerza. Como en los tiempos del Imperio Romano.
Cardenal Bertone: embargo contra Cuba es inaceptable
El cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado del Vaticano, deploró el embargo contra Cuba, al que calificó, repitiendo las palabras de Juan Pablo II, como "injusto y éticamente inaceptable".
Curar cáncer con gelocatil
Samak Sundarave
Por Xavier Caño (*)
El dolor de cabeza se puede eliminar con gelocatil o ácido acetilsalicílico, eficaces analgésicos para cefaleas leves. Si el dolor es intenso, porque su origen es un tumor cerebral, esos medicamentos son inútiles, y usted perderá tiempo precioso, y acaso la vida, por no atacar el origen del dolor.
Ambiente de una fragmentación masiva
Por José Carlos García Fajardo (*)
Los medios de comunicación nos bombardean con imágenes de un rompecabezas o de un caleidoscopio que no nos permite pensar. Ese es el objetivo, matar el silencio y acelerar los procesos del conocimiento para no darnos tiempo a ponderar, comparar, razonar, escuchar y tomar decisiones libremente, o al menos, de manera responsable. Hace tiempo que la libertad está tan mediatizada por las costumbres inducidas que han logrado amortiguar la sensibilidad. Y esta es imprescindible para actuar como ser humano consciente y responsable.
Derecho a la salud o negocio
Por Ana Muñoz (*)
Pacientes en salas de espera, nuevos barrios sin centros ambulatorios, largas listas de espera para intervenciones, camas de hospitales en los pasillos… y profesionales desmotivados y cansados, en muchos casos, con más de 200 horas de trabajo al mes. Esta podría ser la realidad de países empobrecidos, sin embargo, se trata de España.
La infancia se debate
Por Carlos Miguélez (*)
En caso de ganar las próximas elecciones, el candidato de la oposición a la presidencia de Gobierno de España promete rebajar la edad penal de los catorce a los doce años en casos de ‘gravedad especial’ o ‘multirreincidencia’, aumentar las penas de internamiento y poner en marcha planes de prevención de la delincuencia juvenil y planes de seguridad en centros escolares. Mientras tanto, el Departamento de la Infancia, Escuela y Familia del Gobierno inglés reconoce ya el derecho de cada niño a acceder a cinco horas de cultura de alta calidad a la semana.
Y si miras atrás…
Por Ana Muñoz (*)
Una galleta de barro es lo único que pueden llevarse a la boca cientos de personas que sobreviven en países como Haití. En este país, familias enteras tan sólo pueden permitirse comprar en el mercado estas “galletas” que cuestan tres céntimos de euro. Una taza de arroz, son 20 céntimos.
Europa entre ‘Odisea del espacio 2001’ de Kubrick y ‘1984’ de Orwell
Por Xavier Caño (*)
La Unión Europea fichará a los extranjeros que viajen a su territorio. Quizás por haber soportado muchos años una dictadura, “fichar” lo asocio a control policial, respuesta penal, delito. Por tanto, para los dirigentes de la UE, todos los extranjeros son potenciales delincuentes, según la nefasta política forjada en los EEUU de Bush de actuar ‘preventivamente’, como mostró con la invasión de Iraq. La UE no llegará a tanto; sólo fichara policialmente a millones de extranjeros.
El día en que Bush abrió la caja de Pandora
Por Adrián Mac Liman (*)
Banderas estadounidenses y británicas presidieron, junto con el estandarte de la Unión Europea, los festejos que acompañaron, el pasado día 17, la declaración unilateral de independencia de un nuevo micro Estado europeo: Kosovo. “Gracias, América”, rezaban las pancartas de los eufóricos albano-kosovares. Pero los gobernantes europeos difícilmente podían compartir el júbilo de la étnia albanesa. Muchos pensaron que la decisión del Presidente Bush de reconocer el nuevo país balcánico sin esperar el veredicto del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas abriría la caja de Pandora de los nacionalismos europeos.